¿Necesito registrar mi libro y obtener un número ISBN?
Vamos con ello. Mira, el tema del registro de un libro y el ISBN parece más complicado de lo que realmente es, pero te voy a desglosar esto de manera clara y sin rollos técnicos para que, cuando acabes de leer, tengas todo clarito como el agua.
Lo primero: ¿Es obligatorio registrar un libro? Pues no, al menos no en todos los países ni para todos los casos. Si escribes un libro y lo quieres mantener solo para ti, tipo diario secreto o para compartirlo con un par de amigos, no necesitas registrar nada. Pero si tu idea es que salga al mundo, que se publique, que lo lean miles de personas y hasta ganar algo de dinerillo con él, ahí la cosa cambia.
Registrar tu obra en el registro de propiedad intelectual te da algo muy valioso: protección legal. Significa que si alguien te copia, plagia o intenta venderlo como suyo, puedes tomar acciones legales y demostrar que es tuyo. Es como ponerle una alarma a tu coche. Nadie quiere que se lo roben, pero si pasa, mejor estar preparado, ¿no? Así que, si piensas que tu libro tiene futuro, regístralo. Tampoco es que sea algo caro y dormirás tranquilo.
Ahora bien, vamos con el ISBN, ese numerito que parece el DNI de los libros. ¿Es obligatorio? Depende. Si vas a autopublicarte en plataformas como Amazon, muchas veces ellas mismas te proporcionan un ISBN gratuito (un número ASIN en el caso de libros digitales Kindle) . Pero ojo, que ese ISBN ni el ASIN no es «tuyo», es de la plataforma. Si quieres tener el control total de tu libro, deberías tramitar tu propio ISBN. ¿Qué ventajas tiene esto? Que puedes vender tu libro donde te dé la gana, desde Amazon hasta librerías locales, sin depender de nadie. Es como tener tu propia casa en vez de vivir de alquiler.
Además, el ISBN no es solo para identificar el libro; también ayuda a los lectores y librerías a encontrarlo. Imagina que tienes un amigo librero y alguien llega preguntando por tu libro. Con el ISBN, lo localiza en un plis. Sin él, todo es más complicado. Imagina un supermercado sin código de barra en sus productos.
Claro, también está el tema del coste. Obtener un ISBN tiene un precio, pero no es una fortuna. Piénsalo como una inversión en tu carrera como escritor. Si vas en serio con esto, el ISBN es parte del pack profesional.
Y aquí viene la pregunta del millón: ¿necesito las dos cosas, registro e ISBN? La respuesta corta es no. Pero si planeas distribuir y comercializar tu libro, especialmente en varias plataformas, lo ideal es tener ambos. El registro es tu escudo contra copias y el ISBN, tu pasaporte al mercado global.
Ah, y un detalle final: registrar tu libro o pedir un ISBN no significa que vayas a venderlo como churros. Eso depende de tu esfuerzo, promoción y, claro, de que el libro sea bueno. No hay registro que te salve de una mala historia, así que, antes que nada, asegúrate de que lo que tienes entre manos vale la pena.
P.D.: Si ya tienes el libro escrito y aún no sabes qué hacer, no te quedes paralizado. Lo peor es no hacer nada. Regístralo, sácale un ISBN y lánzate. No esperes a que sea perfecto porque la perfección es como los unicornios: todos hablan de ellos, pero nadie los ha visto. 😉
