De Wattpad al mundo: la revolución silenciosa de Mercedes Ron
Si estás en esto de escribir —no como hobby, sino con la intención de construir algo serio, propio y rentable— el nombre de Mercedes Ron debería estar en tu radar. Y no porque sea una autora juvenil de moda o porque sus libros se estén adaptando al cine. No. Debería interesarte porque representa exactamente lo que muchos de nosotros queremos demostrar: que autopublicar no es un atajo, es un camino. Y si se hace con cabeza, puede llevarte muy, muy lejos.
Mercedes nació en Buenos Aires en 1993 y no tardó mucho en encontrarse con el muro clásico: las editoriales no querían publicar su primera novela. ¿Y qué hizo? ¿Se deprimió? ¿Guardó su manuscrito en el cajón? ¿Decidió escribir solo para su gato? No. Agarró Culpa mía, la subió a Wattpad, y empezó a ganar lectores rápidamente. En poco tiempo, la historia explotó. Y cuando digo explotó, me refiero a millones de lecturas, miles de fans y un fenómeno literario que terminó siendo imposible de ignorar.
La editorial Penguin Random House la fichó en 2017, cuando ya no quedaban dudas de que Mercedes tenía entre manos un diamante. Publicaron la trilogía Culpables en papel y el resto es historia: tres millones de ejemplares vendidos, adaptaciones cinematográficas por Amazon Prime Video, una comunidad de lectoras fanáticas y una carrera que no para de crecer.
Ahora bien, lo interesante no es solo su éxito, sino cómo llegó hasta allí. Porque todo arrancó con un rechazo y una plataforma gratuita. Y ese detalle lo cambia todo. Es la confirmación de algo que venimos repitiendo en Ciberautores.com desde 2001: si tienes una buena historia, si conoces a tu público y si sabes moverte en el mundo digital, no necesitas que nadie te “descubra”. Puedes empezar ya, por tu cuenta. Como Mercedes.
Y sí, ya lo sé. No todos somos Mercedes Ron. No todos escribimos romance juvenil ni tenemos millones de lectoras adolescentes listas para devorar nuestro próximo capítulo. Pero eso no importa. Lo que importa es la lección de fondo: el poder ya no está solo en las editoriales. Está también en los autores que se atreven a publicar sin pedir permiso, que escuchan a sus lectores, que aprenden marketing y que entienden que escribir un libro es solo la mitad del trabajo.
Mercedes no paró en Culpa mía. Siguió con sagas como Enfrentados, Dímelo y Bali. Y aunque hoy publique con sellos como Montena, nunca ha renegado de sus orígenes. Al contrario. En cada entrevista deja claro que empezó desde abajo, sola, y que su mejor cumplido es saber que muchos jóvenes empezaron a leer gracias a sus libros.
Y si tú también estás en esa fase en la que dudas de si publicar tu historia por tu cuenta vale la pena, te digo algo: mírate en ese espejo. Lo de Mercedes no fue magia. Fue trabajo, constancia, fe en su historia y un canal digital que le permitió llegar directo a su público.
P.D.: En Ciberautores.com llevamos más de 20 años hablando de esto. Y cada historia como la de Mercedes Ron no hace más que confirmarlo: la autopublicación no es un plan B. Es, para muchos, el mejor plan A.