Si quieres vender tu libro y no estás usando YouTube, te estás perdiendo una interesante fuente de lectores. No es broma. YouTube no es solo la tierra prometida de los videos de adolescentes jugando Roblox y retos increíbles; es el segundo motor de búsqueda más grande del mundo después de Google. Y eso significa que ahí hay millones de ojos esperando algo interesante. ¿Qué tal si uno de esos «algos» es tu libro?
Vamos al grano: promocionar libros en YouTube es una jugada maestra porque conectas con la gente a un nivel que ni los anuncios ni las redes sociales tradicionales pueden igualar. Aquí no solo muestras tu libro; cuentas su historia, das la cara y, con suerte, enganchas a alguien tanto que ni se lo piensa antes de comprarlo. Vamos, que pasas de ser un autor invisible a un humano real al que merece la pena leer.
Ahora, hablemos de cómo hacerlo bien. El primer paso es abrir un canal. No necesitas cámaras de Hollywood ni un estudio digno de Spielberg. Un móvil decente y un poco de creatividad bastan. Sube contenido donde hables de tu libro, cuentes anécdotas de la escritura o compartas tus mejores secretos como autor. Pero ojo, que no sea un monólogo de venta directa, que eso espanta más que los spoilers. Dale valor al público. Si te conviertes en alguien interesante, tus libros serán la guinda del pastel.
¿No tienes tiempo o ganas de ser youtuber? No pasa nada. Para eso están los booktubers. Esos locos apasionados de los libros tienen seguidores fieles que se tragan todo lo que recomiendan. Una reseña suya sobre tu obra puede significar la diferencia entre vender 10 libros o 1.000. Solo asegúrate de que tu historia valga la pena, porque si no, por muy buena promo que hagas, será como vender helados en el polo.
Otra idea: haz un booktrailer. Sí, como los de las películas, pero para tu libro. No te compliques demasiado. Algo corto, visualmente atractivo y que deje al espectador diciendo: “¡Lo necesito ya!” Ah, y si tienes ganas de interactuar, monta sesiones en vivo donde leas un capítulo, respondas preguntas o hables del trasfondo de tu historia. El truco está en crear conexiones. Si ellos sienten que te conocen, querrán leer lo que tienes que contar.
Ahora, un poco de inspiración para que veas que no te estoy vendiendo humo. Germán Garmendia, el youtuber chileno que conquistó medio planeta, lanzó un libro y vendió miles de copias como si fueran churros calientes. ¿El secreto? Su audiencia ya lo amaba. Y luego está Amy Landino, que pasó de videos casuales a libros que se devoran como pan recién horneado.
YouTube puede ser tu mejor aliado para que tu libro salga del anonimato. Hazlo bien y, con un poco de suerte, estarás contando historias a una audiencia que no solo quiere leerte, sino también escucharte.
P.D. Si necesitas un empujón para empezar, sube un video diciendo: “Hola, este es mi libro y esto es por qué deberías leerlo.” Quizás no sea perfecto, pero es mejor que seguir esperando a que las ventas lleguen solas.