Maquetar un libro para Kindle utilizando Word requiere prestar atención a ciertos detalles para que el resultado sea profesional y funcional en el formato digital de Amazon. Lo primero que hay que tener en cuenta es que los libros digitales no tienen páginas fijas como los libros impresos, ya que el contenido se adapta al tamaño de la pantalla del dispositivo y a las preferencias del lector, como el tamaño de la letra. Por eso, el diseño debe ser fluido y sencillo. A continuación, se describen los pasos clave para lograr una buena maquetación.
Configuración básica del documento
Para comenzar, abre tu archivo en Word y configura un tamaño de página que sea cómodo para trabajar. Aunque Kindle ajusta automáticamente el contenido, es recomendable usar tamaños estándar como A4 (21 x 29,7 cm) o Carta (8.5 x 11 pulgadas). Esto facilita la edición sin preocuparse por el tamaño final, ya que será ajustado por el dispositivo. Las plantillas de edición para formato impreso no te serán de utilidad en este caso.
Los márgenes también deben ser simples y uniformes. Configúralos en 2 cm para cada lado (superior, inferior, izquierdo y derecho). Este espacio es suficiente para mantener el texto limpio sin ocupar demasiado espacio en las pantallas.
Otro punto importante es que los libros digitales no necesitan numeración de páginas. Kindle no utiliza esta funcionalidad, ya que el número de páginas varía dependiendo del tamaño de la letra elegido por el lector. Por lo tanto, asegúrate de desactivar la numeración. Esto se hace fácilmente en Word desde la pestaña «Insertar» seleccionando «Número de página» y luego eligiendo «Quitar números de página».
Formato del texto
El texto debe ser fácil de leer y estar correctamente alineado. Utiliza fuentes clásicas y profesionales como Garamond, Bookerly o Times New Roman, que son ideales para lecturas largas. Configura el tamaño de letra en 11 o 12 puntos, suficiente para una buena legibilidad.
Para darle un aspecto profesional al contenido, selecciona todo el texto y ajústalo a justificado. Esto alinea los párrafos uniformemente a ambos lados, creando un diseño ordenado. También es importante ajustar el interlineado. Usa un espacio entre líneas de 1.15 o 1.5, lo que facilita la lectura en cualquier dispositivo. Asegúrate de que no haya espaciado adicional antes o después de los párrafos.
Si tu libro tiene capítulos, utiliza los estilos de encabezados que Word ofrece. Aplica el estilo Titulo 1 para los títulos principales y Titulo 2 o 3 para subcapítulos o secciones internas. Esto no solo le dará un aspecto organizado, sino que también facilitará la creación de un índice interactivo, una característica esencial en los libros Kindle.
Estructura del contenido
Cada capítulo debe empezar en una nueva página. Para asegurarlo, inserta un salto de página al final de cada capítulo. Esto se hace en la pestaña «Diseño», seleccionando «Salto de página». De esta forma, el contenido quedará bien separado sin depender de espacios manuales.
El índice del libro es un elemento clave, pero en Kindle no se basa en números de página, sino en enlaces interactivos. Una vez que hayas aplicado los estilos de encabezado, Word puede generar un índice automáticamente. Para hacerlo, ve a la página donde quieras colocarlo, haz clic en la pestaña «Referencias» y selecciona «Tabla de contenido». Esto creará un índice que los lectores podrán usar para navegar fácilmente.
Elementos adicionales
Si planeas incluir imágenes, recuerda que deben ser de buena calidad, preferiblemente con una resolución de 150 a 300 dpi. Inserta imágenes en formato .jpg o .png directamente desde la opción «Insertar» en Word. Es importante que las imágenes se ajusten al ancho del texto y que no dependan de un diseño rígido, ya que el formato fluido de Kindle puede reorganizarlas.
También debes prestar atención a los hipervínculos. Si tienes enlaces en el texto, asegúrate de que estén bien configurados y funcionen correctamente. Kindle admite enlaces tanto a otras partes del libro como a sitios web externos.
Evita el uso de sangrados, tabulaciones o espacios adicionales para posicionar elementos. En lugar de eso, utiliza las herramientas de alineación y diseño de Word, ya que el formato digital reorganiza el contenido automáticamente.
Conversión y prueba final
Una vez que hayas terminado de editar tu libro en Word, no es necesario realizar conversiones complicadas. Kindle Direct Publishing (KDP) permite subir directamente archivos en formato .DOCX. Esto facilita el proceso, ya que Amazon se encargará de convertir el documento automáticamente al formato Kindle durante la carga.
Para asegurarte de que el archivo se procesa correctamente, revisa que el diseño esté limpio, sin estilos innecesarios o elementos complejos como tablas con formatos específicos. Una vez que el archivo esté listo, simplemente accede a la plataforma de KDP, selecciona tu libro y sube el archivo en formato .DOCX. Antes de publicarlo, podrás utilizar la vista previa que ofrece KDP para revisar cómo se verá tu libro en los dispositivos Kindle.
Si prefieres un control más detallado sobre el diseño antes de subir el libro, también puedes utilizar Kindle Create, una herramienta gratuita de Amazon. Aunque no es obligatorio, esta aplicación permite optimizar el archivo de Word, añadir toques finales como portadas interactivas o tablas de contenido, y exportarlo en formato .KPF, ideal para garantizar una maquetación perfecta.
¡Muchos éxitos con tu libro!