Cómo Convencer a Todos de Leer tu Libro

Imagina esto: ya tienes tu libro entre manos, recién salido del horno, con ese aroma a tinta fresca y a papel nuevo que tanto te ha costado conseguir. Lo miras, lo acaricias, y sientes ese orgullo que solo alguien que ha sudado y madrugado mil días para ver su sueño cumplido podría entender.

Ahora bien, publicar el libro por tu cuenta es solo la mitad de la batalla. Lo duro viene ahora, que tienes que sacarlo al mundo, que la gente lo conozca y que se interesen por leerlo. Así que, si ya te pegaste el curro de escribirlo, es momento de ponerse manos a la obra para presentarlo como Dios manda.

Lo primero que tienes que hacer es aceptar que la presentación del libro es tu oportunidad de mostrar quién eres y por qué tu libro importa.

Es tu carta de presentación. ¿Sabes esa frase que dice que la primera impresión es la que cuenta? Pues aquí aplica a la perfección. La gente que asista a la presentación no solo viene a escuchar sobre el contenido de tu libro. No, vienen a ver a la persona que lo escribió. A conectar contigo. Y créeme, eso puede marcar la diferencia entre que lo compren o lo dejen en el estante a convertirse en un papiro.

Para empezar, olvídate de las presentaciones aburridas donde te sientas y lees un capítulo del libro en voz alta como si estuvieras en el colegio. No hay nada peor que ver a alguien leer su propio libro durante media hora mientras los asistentes se van quedando dormidos.

Aquí tienes que innovar un poco. ¿Por qué no contar la historia de cómo se te ocurrió la idea? Cuéntales las dificultades, las veces que pensaste en tirar la toalla, los momentos de bloqueo donde te mirabas al espejo y te decías «¿pero qué demonios estoy haciendo?». A la gente le encanta escuchar lo real, lo humano detrás del autor. Haz que te vean como una persona, no como una máquina de escribir.

Elige bien el lugar para la presentación. Puede ser en una librería, sí, pero no te limites. Piensa en otros espacios que tengan algo que ver con el tema de tu libro. Si has escrito sobre naturaleza, organiza la presentación en un parque. ¿Es sobre viajes? Lánzate a un café con aires bohemios que invite a la gente a soñar con nuevas aventuras.

Los espacios inusuales atraen a las personas por pura curiosidad, y una vez allí, tú les das la magia.

Ahora bien, viene lo bueno. ¿Cómo hacer para que la gente quiera venir a tu presentación? Fácil, crea expectación. Aprovecha las redes sociales, los contactos, y sobre todo, no subestimes el boca a boca.

Puedes hacer algo tan simple como grabar un vídeo (casero, no hace falta que contrates a Spielberg) invitando a tus seguidores a la presentación. Diles qué se van a llevar si van: una experiencia, no solo un libro.

Ojo, que no te estoy diciendo que regales el libro ni mucho menos, pero sí que puedes ofrecer algo más. Quizás una pequeña charla motivacional, un café con el autor (sí, contigo), o incluso que al final firmes y dediques personalmente cada copia. Eso la gente lo valora.

Otro truco que nunca falla es asociarte con otros escritores o influencers que puedan estar interesados en tu temática. Ellos ya tienen su audiencia y si te recomiendan, es casi como si te dieran el pase VIP a un montón de nuevos lectores. No se trata de arrastrarte ni de mendigar, sino de colaborar y de construir relaciones. Al final del día, el éxito es una cuestión de contactos tanto como de talento. Y si tienes ambos, ¡mejor!

A lo mejor estás pensando, “pero si yo no conozco a nadie”. Pues te diré algo: empieza por hablar con quienes ya te conocen. Amigos, familiares, colegas de trabajo. No te avergüences de pedirles que te ayuden a correr la voz. Si ellos creen en ti, estarán encantados de difundir tu mensaje.

Incluso si son cuatro gatos los que lleguen a la presentación, si todos compran el libro y se lo recomiendan a alguien más, eso es empezar con buen pie. Lo que no puedes hacer es quedarte de brazos cruzados esperando que la gente se entere por arte de magia de que tu libro existe.

Y no olvides una cosa crucial: hazlo divertido. Si te lo tomas demasiado en serio, todo se vuelve pesado y aburrido. Haz que la presentación sea más una fiesta que una conferencia. Ríete de ti mismo, cuenta alguna anécdota graciosa del proceso, haz que la gente se sienta cómoda. Cuanto más relajados estén, más probable es que conecten contigo y, por lo tanto, con tu libro.

Ah, y por si te lo estás preguntando: no te pongas demasiado técnico con las ventas. No atosigues a la gente con un “compra, compra, compra”. Basta con decirles dónde pueden comprar el libro al final de la presentación, y si tienes suerte, llevar unas cuantas copias contigo para que las adquieran ahí mismo. Nada de ponerse en plan vendedor de teletienda, que eso huele a distancia. Si haces una buena presentación, los libros se venderán solos.

Así que ya lo sabes. La presentación de tu libro no es solo el evento donde la gente viene a escuchar de qué trata. Es tu oportunidad para brillar, para conectar, para dejar huella. Porque al final, un libro no es solo el contenido. Es la experiencia que creas alrededor de él, y esa experiencia empieza contigo.

Sé que será un gran impulso para tu libro y tu carrera de escritor.

Javier Carbaial

P.D.: Y por cierto, cuando veas a la gente sonreír o emocionarse durante tu presentación, sabrás que valió la pena todo el esfuerzo.

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Javier Carbajal

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